Tesauro. Correspondencia entre Belén Zahera y Cristina Mejías.
Relacionamos palabras y cosas, recomponemos, articulamos relatos. ¿Cómo se arman las historias? Memoria e imaginación se localizan en la misma zona cerebral, el hipocampo, pero operan a través de patrones neuronales distintos, estableciendo regiones diferenciadas en esta pequeña estructura. Muchos piensan que la memoria consiste en retroceder y la imaginación en proyectar, pero todos sabemos que incluso el peor de los relatos es capaz de jugar en ambos campos, haciendo pasar por recuerdos lo que nunca ha ocurrido y describiendo las experiencias más reales como hipótesis fantásticas. Las historias serían entonces como una especie de atajo, un agujero de gusano que conectaría los extremos del hipocampo a través de un túnel o garganta.
Todas las historias forman un istmo.
Todas las historias comienzan con un carraspeo.*
*Texto extraído de Tesauro, conversación entre Belén Zahera y Cristina Mejías (2015)
Vistas de la exposición Correspondencias de Ultramar #4,
Ana Navas y Cristina Mejías en la sala Mezzanina de la Fundación Mendoza,
comisariado por Patricia Hambrona
Caracas, Venezuela